En la actualidad es común observar que las empresas están optando crear trabajos desde casa, cada vez más adaptados y con KPI´S que miden el desempeño de los empleados. La conexión entre los promocionales y las empresas existirá mientras estas mismas busquen conectar con las personas. Si lo pensamos por un momento y según estudios de PPAI, un promocional es recibido por su uso el 68% de las veces y en el peor de los casos es recibido por una persona que posteriormente lo regalará a otra que si lo utiliza. Si tomamos estos datos comparados al alcance que tiene la publicidad en redes sociales probablemente no exista mucha comparación, pero a su vez, sabemos que las relaciones cara a cara se vieron bastante afectadas durante este tiempo. No escribo esto para convencerte de que un promocional es la solución a un negocio porque la realidad es que no lo es, ni lo fue, ni lo será. Pero de algo estamos convencidos, puede ser una herramienta completamente útil, muy probablemente que sirve más que antes de la pandemia y a continuación te diré 3 puntos que creo que resaltaron de esta situación:
- Nostalgia: Las personas extrañamos convivir como lo hacíamos antes, nos atenemos a recordar como era todo antes de vivir esto. Relación interesante con los promocionales...
- Relación híbrida: Nace una nueva modalidad de compra en la que interviene un grupo de clientes y el vendedor de forma presencial pero a su vez esta interacción se graba y se promociona por redes sociales para tener un mayor alcance.
- Comercio electrónico: Locales que se vuelven almacenes y microempresas que compiten con las grandes marcas. ¿En dónde se originará la diferencia ahora?
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